El ciclo lectivo 2010 se inauguró en el IPEM 349 de Colonia Caroya. Allí, el gobernador Schiaretti hizo una catarata de promesas.
Cualquiera podría decir que la “tropa” del IPEM 349 Giovanni Bosco de Colonia Caroya es bastante indisciplinada. O mejor dicho: que no le gusta que le digan lo que tiene que hacer y mucho menos si una orden viene de alguna esfera de poder.
Esa fue la impresión que se llevaron muchos de los que asistieron a la inauguración del ciclo lectivo 2010 en el que el gobernador Juan Schiaretti hizo gala de sus mejores promesas.
A los hechos nos remitimos. A los alumnos se los había dotado de globos celestes y blancos y de banderas de plástico en cantidades generosas. El que diagramó “la” foto imaginó que los alumnos del Giovanni Bosco iban a hacer flamear las banderas y globos tras el ingreso del gobernador. Imaginó, tal vez, algunos vítores, aplausos, loas, gestos aprobatorios… pero nada de eso ocurrió.
Más bien, los alumnos se mostraron respetuosos para con el gobernador provincial pero no voló ni una mosca durante la alocución del primer mandatario ni tampoco después.
Ni siquiera las arengas en voz alta que hizo Schiaretti lograron conmover a los adolescentes que concurren a la escuela más nueva que tiene Caroya.
Apenas si aplaudieron las tres filas en las que se sentaron las autoridades regionales y de distintas áreas de Educación, bien adelante, cerca del orador principal.
Puede entenderse lo que pasó en varios sentidos, pero no estamos lejos de poder señalar que cunde en los jóvenes cierta apatía hacia todo lo que proponen los políticos, máxime si están en el gobierno. Y debiera ser para los gobernantes una llamada de atención sobre la falta de llegada a la población más joven.
Yendo al mensaje principal del gobernador, hubo anuncios muy interesantes. Quizás, el principal sea que quiere dotar a todas las escuelas públicas de computadoras y de acceso a Internet. El anuncio va en consonancia con una tendencia internacional y nuestro país está moroso con esa tendencia.
Otras promesas eran esperables tratándose este año del año del bicentenario de la revolución de mayo. 200 salas nuevas de tres años para jardín, 200 escuelas sumadas al régimen de extensión de jornada escolar para familias vulnerables, 150 nuevas aulas, entrega de desayuno reforzado en Paicor y aumento a 100 pesos para la asignación a casa beneficiario de Paicor para compra de útiles o zapatillas.
El mandatario se refirió también a la importancia de que durante este año se debata y se sancione la nueva Ley de Educación de la Provincia porque es importante que “seamos capaces, a través del dialogo y el debate, de alcanzar los consensos que nos permitan mejorar la educación de todos nuestros hijos”.
Será sobre el cierre del presente ciclo lectivo cuando los cordobeses podamos tomar exámen sobre las promesas cumplidas en el año en que se conmemora nuestro primer grito de independencia como Nación.
Un asiduo visitante
La presencia del gobernador Juan Schiaretti en nuestra zona parece ser una constante de los últimos tiempos, particularmente en Colonia Caroya a la que eligió como lugar para dejar inaugurado el ciclo lectivo 2010, en las instalaciones del IPEM 349 Giovanni Bosco.
En su carácter de anfitrión, el intendente de Colonia Caroya, Rodolfo Visintín, fue el encargado de brindar las palabras de apertura del acto protocolar. El jefe comunal agradeció a las autoridades provinciales por honrarlos con la presencia y por haber permitido que la ciudad cuente, desde este año, con un añexo del IPEM 69 de Jesús María.
“Va más allá de la necesidad de tener un banco para hacer el secundario, como popularmente se dice, hay muchos jóvenes que quieren tener una profesión y la demanda del medio así lo exige”, señaló Visintín sobre la puesta en marcha del anexo de la “Técnica”.
El jefe comunal caroyense aprovechó la ocasión para repasar las acciones que lleva adelante en materia educativa, por caso, los seis centros de apoyo escolar, el sistema de becas de transporte al que se le destinan cinco mil pesos mensuales, y el transporte para personas con discapacidades. “La idea es que nadie deje o tenga excusa para no ir a la escuela”, reseñó Visintín.
La directora del IPEM 349, Mercedes Salort, tomó la palabra en segundo lugar para expresar la alegría y el placer de que una institución de apenas seis años haya sido elegida para el inicio del período escolar. “Este bicentenario nos encuentra trabajando fuertemente en importantes proyectos. El material humano de esta escuela es nuestra máxima fortaleza: nuestros alumnos, nuestros docentes, y todo el personal”, resumió Salort.
“El compromiso de esta institución –añadió la directora- en el bicentenario es seguir trabajando en la inclusión: los chicos tienen que estar en la escuela. De una inclusión que se fundamente en equidad y también en calidad. Los docentes tenemos una tarea mágica que hacer cada día”.
Después llegó el turno del gobernador Schiaretti, quien formuló un rosario de compromisos para el año del bicentenario, entre los que se destacaron: Primero, la entrega a través de Paicor de un desayuno reforzado y de 100 pesos a cada beneficiario para compra de guardapolvo, útiles o zapatillas. En segundo término, anunció la apertura de 200 salas de tres años en los jardines. Y la lista continuó con la extensión de jornada en otras 200 escuelas que asistan a niños de barrios pobres, más la construcción de 150 aulas nuevas en colegios que necesitan ampliar su capacidad.
No obstante, el anuncio más fuerte se vinculó con la noticia de que el gobierno quiere dotar de computadoras y acceso a Internet a todas las escuelas públicas que dependen del estado provincial.
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“Este será el año de la Educación en Córdoba”
Claudio Minoldo
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