El gobierno de Córdoba invierte 402 mil pesos en el edificio pero los directivos trabajan con el equipo docente y con los padres para poner a la escuela en otra situación frente a la comunidad.Históricamente, la matrícula de la escuela Pedro Giachino ha sido muy baja, orillando los 300 alumnos en dos turnos, pero el nuevo equipo directivo, compuesto por el director Daniel Paredes y la vicedirectora Carolina Escobedo, está decidido a torcer el rumbo y poner a la escuela en el concierto del resto de las instituciones de la ciudad.
Y lo primero que hicieron fue movilizar un expediente que llevaba 17 años sin respuesta en el gobierno de Córdoba que accedió a financiar una serie de mejoras en el establecimiento por una cifra de 402 mil pesos. La escuela Giachino será, además, una de las escuelas donde se implementará en forma piloto el programa de jornada extendida.
Con los arreglos de la escuela en marcha, se logró movilizar y comprometer a un grupo de padres que renovó la cooperadora y se puso la camiseta del colegio y comenzó a trabajar.
A principios de septiembre, la escuela contará con dos nuevas aulas que cubren una superficie de 50 metros cuadrados, aproximadamente, y se arreglaron los baños, se hizo un baño para docentes, se pintó toda la escuela, se revocaron las tapias del lado este de la escuela, se cambió el tendido de energía eléctrica, y se está instalando el gas natural.
Paredes señala que se encontró con una escuela “estática” cuando se hizo cargo de la dirección en febrero de 2009 aunque esperando ser movilizada. En tal sentido, se diseñó desde el equipo directivo un plan estratégico para llegar a los docentes y lograr avances en lo edilicio que permitan el avance en lo pedagógico.
“Más se ve lo que es pintura, obra, pero eso no es la escuela. Eso es un aspecto de la escuela”, aclaró Paredes después de señalar que los cambios en lo pedagógico son más difíciles de visualizar.
Pero vale la pena enumerar algunos de esos logros: se redujo drásticamente la tasa de accidentes dentro de la escuela y la petición de servicios de emergencia, se trabajó en resolver la problemática de alumnos cuyas notas permanecían siempre en la línea de satisfactorio, y se diseñaron una serie de juegos -hasta se permitió el fútbol en los recreos- para que los alumnos se entretengan sin necesidad de apelar a los juegos bruscos o violentos.
Asimismo, lograron formar un consejo escolar que integran padres, alumnos y docentes y cuya próxima acción es una matiné bailable para el sábado 28 de agosto, de 16:30 a 19, y cuya entrada fue fijada en dos pesos.
“Teníamos que mostrarles algo a los padres para que se arrimen y eso se logró con estas mejoras edilicias pero en forma conjunta vamos trabajando con los docentes en diferentes temas que tienen que ver con contenidos y estrategias para trabajar en los distintos grados y distintos ciclos”, explicó Paredes remarcando que la escuela es lo que pasa adentro del edificio que la contiene.
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