Guillermo Romanutti y Ricardo Monjes, coordinadores de la Pastoral Juvenil de Colonia Caroya se mostraron sumamente agradecidos por la respuesta de la gente frente a la solicitud de colaborar con el Hogar en Tránsito el Principito durante la realización de la tradicional fogata de San Pedro y San Pablo que tuvo lugar el martes pasado en Colonia Vicente Agüero.
“La idea surgió cuando la gente del hogar nos comentó que estaban pasando por un momento complicado porque se habían demorado unos pagos y sus ingresos y decidimos ayudarlos de alguna forma y lo mejor que se nos ocurrió con los chicos del Ducj Insieme fue recolectar alimentos no perecederos que siempre vienen bien y más para los niños del Hogar en Tránsito”, señaló Romanutti.
Claro que la iniciativa no quedó restringida a esa ocasión sino que quienes quieran seguir colaborando pueden comunicarse con la Pastoral Juvenil y hacer llegar sus donaciones, como bien apuntó Monjes: “Los chicos de la Pastoral tienen otras actividades pensadas, no sólo recaudando estas mercaderías sino acompañando a estos chicos durante todo el año, yendo a visitarlos, organizándoles juegos e, incluso, acompañándolos espiritualmente, y en todo sentido. La colaboración no pasa sólo por una cuestión material sino un acompañamiento más integral”.
En la Pastoral Juvenil de Colonia Caroya vienen trabajando unos 25 adolescentes y jóvenes divididos en tres grupos -de 13 a 15 años, de 16 a 17, y de 18 años en adelante- con actividades que buscan aplicar la fe de la Iglesia en la vida cotidiana para mejorar su forma de vida.
“Hoy, nos ofrecen muchas variantes cuando tratamos de elegir nuestra ideología. Nosotros tratamos de darles herramientas para que puedan elegir una ideología que le ayude a tener un futuro digno, a crecer moralmente, y a seguir profesando la fe que es lo que a nosotros nos impulsa a hacer todas las actividades que tenemos”, completó Romanutti.
Los interesados en sumarse a las actividades de la Pastoral pueden acercarse a la Secretaría parroquial o acercarse los domingos después de la misa de las 20.30 (el grupo de los jóvenes más grandes) en la sala de la amistad o los sábados a la tarde desde las 15. Al término de la fogata, la Pastoral Juvenil había juntado cuatro cajas con alimentos no perecederos (azúcar, aceite, entre otros).
Ducj Insieme volvió a hacerlo: logró un encuentro divertido, convocó a muchas familias, organizó juegos para los más chicos, invitó a los referentes de mayor edad de Sandurí a encender el fuego de la fogata, y distribuyó entre los asistentes dosis generosas de galletas de novia, pururú, batatitas al rescoldo y ofreció vino caliente, chocolate caliente, y Tía María casero. Más no se le podía pedir a esta maravillosa fiesta.
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