Una treintena de trabajadores municipales de Jesús María, que llevan muchos años trabajando bajo contrato, inició durante la semana una movilización después del horario de trabajo hacia el edificio municipal para reclamar por mejores salarios.
La mayoría de los que protestan perciben de bolsillo 1400 pesos -información que se puede constatar en la página web del municipio- y quieren una recomposición urgente, habida cuenta que muchos de ellos se declararon en una situación angustiante.
Durante el primer día de la manifestación que motoriza el sindicato ATE, los trabajadores fueron recibidos por el intendente municipal en su despacho donde descargaron su preocupación.
“Creo que en el Estatuto hay muchas pautas que están claras, pero está hecho pura y exclusivamente para el empleado de planta permanente. Si le hiciéramos caso al Estatuto en que no se puede pagar menos que el mínimo, vital y móvil (eliminado por una modificación de 2004). Si cobráramos esos 1740 pesos de básico que hoy está vigente en la Ley, y la mayoría cobrara el insalubre que le corresponde, el título, y todos los adicionales de categoría, esto no sucedería”, señaló uno de los delegados de ATE, José Moyano.
“Por eso mismo -añadió Moyano- necesitamos ser planta permanente para poder cobrar todos esos adicionales que corresponden para que podamos vivir. Si fuese de esa manera nosotros no tendríamos que estar acá. Con los muchachos dijimos que Jesús María está hermosa, que se tienen que hacer obras, pero el que hace la obra y el que trabaja -para que Jesús María esté limpia- está mal”.
“Me duele trabajar con gente que está con hambre. Hay chicos de las cuadrillas que entre el 20 y el 30 de cada mes viven a mate cocido y pan. Es jodido manejar gente así. Se complica manejar gente que está disconforme hasta con lo que come. No es un capricho”, señaló otro de los trabajadores en el tramo más duro de la reunión con el intendente.
Gatica dejó en claro que no resolverá la cuestión apelando a la demagogia: “Para mí sería muy fácil tomar decisiones para quedar bien a costa de consecuencias futuras que muchos de ustedes lo han vivido como es cobrar en cuotas o cobrar salteado. No voy a ceder a la tentación de quedar bien con lo que no es mío. Me voy el año que viene y podría quedar bárbaro con ustedes tomando algunas decisiones que los conforme y dejando un flor de perno al que viene. No lo voy a hacer”.
Más allá de la aclaración, el jefe comunal expresó que la entrega de un bono de 400 pesos extras en estos días a todos los trabajadores, el incremento de un 20 por ciento previsto para 2011 y a pagar un porcentaje de ese aumento desde el primer salario del año, más el blanqueo de 200 pesos que actualmente se entregan en tickets constituyen una prueba de que el gobierno local está dispuesto al diálogo para satisfacer la demanda de los trabajadores.
Vale recordar que muchos de esos trabajadores fueron pasados a planta permanente durante el gobierno del ex intendente Lucas Torres (PJ) pero fueron dados de baja sus decretos de nombramiento en la siguiente intendencia con Jorge Colombo (UCR) bajo la promesa de que se les mantendría la fuente laboral y que iban a ser pasados a planta permanente. Ya pasaron diez años desde aquellas promesas y no se cristalizaron todavía. Los contratados quieren que se traduzca alguna promesa en actos concretos.
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