A pedido de los concejales de Colonia Caroya, el Jefe del destacamento de Bomberos Voluntarios brindó un panorama detallado sobre los aspectos que hay que tener en cuenta.
El comisario Mayor Juan José Nievas, Jefe del destacamento de Bomberos Voluntarios de Jesús María, dialogó con los ediles caroyenses por espacio de una hora y media sobre la gestión de riesgos y desastres en espacios públicos o reuniones de ocupación masiva.
La invitación de los concejales respondió a la necesidad de analizar si la actual ordenanza que rige los espectáculos públicos tiene plena vigencia o si habrá que formularle algunas actualizaciones que doten al Ejecutivo de mayores herramientas para controlar. Venía a colación, además, de innumerable quejas que vecinos y usuarios presentaron ante los representantes vecinales por la modalidad en que algunos espectáculos se vienen llevando a cabo.
Después de formular una pormenorizada explicación sobre la diferencia entre evento adverso, emergencia, e incidente y de explicar que ya no se habla de “riesgo” sino de vulnerabilidad y amenaza (ecuación que contiene al riesgo), Nievas hizo un relevamiento de las principales amenazas a las que está expuesta Colonia Caroya.
Se mencionó desde la posibilidad de que ramas se desprendan de los gigantescos plátanos, hasta las industrias cuyos procesos demandan uso de productos químicos de altísima peligrosidad y que podrían causar una nube tóxica. Eso, sin contar con los camiones que transportan acido clorhídrico, tolueno, o cloro, y que ingresan a la ciudad sin ningún tipo de control a comprar salame dejando estacionado el vehículo en cualquier lugar.
Aunque pareciera que estos temas nada tienen que ver con los espectáculos públicos, en realidad forman parte de un conjunto de situaciones donde lo que se trata de asegurar es la seguridad humana y dentro de ese espectro se encuentra la seguridad en los lugares de concurrencia masiva.
“A lo mejor lo que ustedes están tratando sea la punta del iceberg y que tiene que ver con la protección de la vida humana. La seguridad pública no se soluciona con una ordenanza pero ésta puede servir para desencadenar políticas públicas sobre seguridad a través de una planificación estratégica”, manifestó Nievas a los concejales.
En tal sentido, señaló que aunque los desastres naturales son difíciles de prever todo municipio puede elaborar un mapa con sus amenazas, de modo que la respuesta ante ese evento adverso sea más eficaz y coordinada.
El jefe de Bomberos Voluntarios fue muy claro, en referencia específica a la cuestión de los espectáculos masivos: “Los que tienen boliches presionan para que les dejen ingresar más gente cada vez con menos infraestructura, pero el municipio es el único que tiene competencia para decir cuántos tienen que entrar”.
Nievas sugirió a los concejales que para la actualización de la ordenanza tengan en cuenta lo que dice el Código de Seguridad Humana NFPA-101 ya que contiene aspectos sobre la protección contra incendios a tener en cuenta en las construcción (paredes corta fuego y barreras de fuego), y apartados sobre sistemas de protección contra incendios donde se aborda el tema de los gabinetes con mangueras, los rociadores automáticos, los extintores portátiles, además de los sistemas de detección, alarma y comunicación. Los ediles solicitaron a Nievas profundizar más sobre el tema antes de reformar la normativa vigente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario