Quedó inaugurada en la ciudad de Deán Funes la Plaza del Viento en la que el reconocido artista plástico deanfunense, Mario Sanzano, junto al artista local Ariel Ramos y los vecinos que quisieron sumarse, plasmó su obra en nueve murales cuyo protagonista principal es el viento, representativo de nuestra ciudad y cuyo invitado especial fue el inspirador de este trabajo el cantautor pampeano, Roberto Yacomuzzi.
La idea nació hace aproximadamente tres años cuando Mario escuchó una canción del disco Confesiones del Viento, interpretada por Liliana Herrero sobre un poema de Roberto Yacomuzzi donde hablaba de la carga de culpa que tiene el viento, “la canción estaba cargada de imágenes bellas y precisas”, recordó Sanzano.
Esa canción inspiró al artista a dibujar una secuencias de figuras hilvanadas por una onda que representaba al viento, protagonista principal de la obra, esa hoja quedó descansando en un cajón no sin antes pensar que la técnica que usaría para esa obra sería el trencadis, usada por Gaudí en costrucciones en Barcelona, el Parque Güell y la Casa Batlló. Pensó hasta el lugar donde le gustaría hacer el trabajo.
Tiempo atrás recordó haber visto que la plaza que está al frente de la Terminal de Ómnibus tenía unos lindos paneles para realizar en ella una obra que perdure en el tiempo y el trencadis era ideal ya que sirve para conservar una obra en el tiempo y no necesita restauración. Cuando Eduardo Ficcini, director de Parques y Paseos dependiente de la Municipalidad, le comentó que se debía remodelar esa plaza, fue el momento de sacar el dibujo que descansaba hace años en el cajón. Así, nacieron los Murales del Viento.
Era un trabajo lento y largo para una sola persona. Entonces, se decidió abrir el juego a toda la comunidad. A este proyecto, se sumó el artista Ariel Ramos que, coincidentemente, había ilustrado el libro Relatos del Viento de Pablo Rosalía. Junto a la participación de otros artistas se convirtió en la suma de voluntades.
La participación y colaboración de toda la comunidad se produjo tanto en el aporte de materiales como en el trabajo. Grandes y niños se involucraron y comenzó la creación de esos nueve paneles donde el viento, los pájaros, el barrilete, la chimenea, el árbol y el viento cobraban vida. La cita fue durante todas las tardes del verano y durante cinco meses hasta que, al fin, se concluyeron “Los Murales del Viento” para orgullo de la sociedad deanfunence. “La satisfacción que me quedó de llevar el arte al espacio público no se puede explicar”, explicó Sanzano sobre la experiencia.
Mario Sanzano es un reconocido artista plástico que nació en Deán Funes y comenzó a dibujar a los diez años cuando se enfermó de hepatitis y tuvo que permanecer durante meses en cama.
Al ingresar al colegio secundario, conoció al pintor Martín Santiago -que era su profesor de dibujo- y le manifestó su interés por verlo pintar. Al tiem-po, Martín tocó su puerta para para invitarlo a su casa y ése fue el inicio de una relación que lo acompañó y guió en sus primeros pasos en el arte y que este joven aprovechó cada una de sus enseñanzas. Martín Santiago fue su maestro durante quince largos años. Pintaba dos cuadros por semana y los analizaba junto al artista.
En tercer año, el profesor lo invitó a llevar algunos de sus cuadros y dar una clase sobre impresionismo. Allí, frente la mirada atónita y atenta de sus compañeros de curso, Sanzano descubrió que su futuro ya tenía horizonte.
A los 17 años, vendió su primer cuadro y cuando tenía 18 años, con quince cuadros realizó su primera muestra en la ciudad de Deán Funes en un local de la Sociedad Rural. Luego, hizo otra muestra en la Biblioteca Mariano Moreno y el servicio militar en la Marina le obliga a suspender todo. Cuan-do regresó, se recibió de profesor de educación física y trabajó como administrativo y de docente, pero nunca dejó de pintar.Tras su paso de exponer en Deán Funes, Jesús María, realizó su primera exposición individual en la ciudad de Córdoba en 1989. En 1996, viajó a Buenos Aires y conoció a Humberto Golluscio, junto a quién expuso en el Unicenter con casi 40 obras, sellando su ingreso al circuito comercial de Buenos Aires.
En 1997, se realizó en el Palais de Glace en Buenos Aires la Exposición Tango, que convocó a un premio internacional de pintura referido al tema, donde participaron más de mil obras y donde Sanzano ganó uno de los premios.
Desde 2000, viene realizando una exposición anual en Buenos Aires en la Galería Alvear junto a la Galería Zurbarán con trabajos nuevos. Ha pintado en Holanda y en Estados Unidos, pero siempre regresa al su terruño.
Tras la declaración como Patrimonio de la Humanidad de las Estancias Jurídicas, Mario pintó las cinco Estancias de la Provincia de Córdoba que luego fueron expuestas en una muestra.
En 2011 pintó El Carrizal", a través de un programa del gobierno de la Provincia de Córdoba de revalorización y puesta en valor del Camino Real donde se recrearon las postas del antiguo camino Real al Perú, y en la que participaron reconocidos artistas cordobeses.
Mario Sanzano es paisajista pero también fue retratista, trabaja con muchas técnicas pero su preferido es el paisaje: “Me gusta estar pintando en el cam-po porque se nota el cambio del sol y cada época del año tiene su encanto”.
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