De conformidad al proyecto del Poder Ejecutivo Nacional, que será tratado por el Congreso, el día 12 de octubre dejará de ser recordado como Día de la Raza y pasará a denominarse Día del Respeto de la Diversidad Cultural. Antes de que las cámaras legislativas traten el mencionado proyecto, es menester hacer algunas consideraciones sobre el tema, empezando por la significación del nombre del día a recordar, habida cuenta que según tengo entendido es objetado porque llevaría consigo o escondería un racismo.
Como es sabido, la designación del 12 de octubre como Día de la Raza, corresponde a un decreto del primer presidente radical Dr. Hipólito Yrigoyen. A nadie que haya estudiado historia Argentina, se le puede ocurrir de que el presidente Yrigoyen era racista, por lo que es obvio que él utilizó ese término con otro sentido. Lo hizo como reafirmación de la identidad hispanoamericana frente a los Estados Unidos y la Doctrina Monroe. Lo que él quiso homenajear, fue al pueblo surgido a partir del 12 de octubre que el “pueblo hispanoamericano” sin distinción racial, esa estirpe criolla tantas veces relegada y postergada. No es otro el sentido que tuvo y tiene ese nombre, y así fue conocido en todos los pueblos hispanoamericanos que aceptaron esa denominación. Así lo entendió el General Perón cuando fue presidente y habló expresamente en defensa del 12 de octubre y en particular de la cultura hispánica haciendo referencia a esta última cuando hablaba que debería estar en todos los frontispicios de las universidades argentinas. Es decir, no se recordaba una raza en el sentido biológico, sino una estirpe en el sentido cultural, conformada por el mestizaje acaecido en América producto, precisamente del 12 de octubre. Para dar un ejemplo de lo que afirmo más arriba, está el caso de México cuya famosa Universidad Nacional Autónoma lleva el lema propuesto por José Vascolcelos, que dice “Por la raza hablará mi espíritu”, y fue precisamente este gran filósofo y pensador mexicano que cuando fue Ministro de Educación en su país, le propuso al presidente Álvaro Obregón, la designación del 12 de octubre como Día de la Raza.
Los Estados Unidos, también conmemoran el 12 de octubre, pero con el nombre de Día de Colón que se convierte en una fiesta italo-americana. La comunidad hispana en los Estados Unidos, sí lo celebra con el nombre del Día de la Raza y es característico el desfile de la comunidad hispana en Nueva York para esa fecha.
Pero evidentemente la idea de la unidad de nuestro pueblos y la construcción de la Patria Grande, tiene muchos enemigos y precisamente nada mejor que desvalorizar o borrar todo lo que tenga que ver con la identidad nacional o identidad iberoamericana y así poder hacer denominaciones tales como “Día de la resistencia indígena” el 11 de octubre en la Venezuela de Hugo Chávez o la propuesta actual de las autoridades nacionales. ¿Qué mejor manera de difuminar lo nacional con una expresión generalista como “Diversidad cultural”? Es como cometer una especie de “criollicidio” cultural.
Comprendemos que en nuestra época hablar de raza, puede tener connotaciones desagradables por las experiencias del nazismo, pero cambiémosle el nombre pero no el espíritu. Pongámosle “Día del pueblo Hispanoamericano” o “Día de la América criolla” o “Día de la unidad Iberoamericana”
Que sepan los señores legisladores lo que van a aprobar y se hagan cargo de ello.
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La charla tendrá lugar este lunes 8 de noviembre en la sede rotaria de Caroya, a las 21.30, y está destinada a los jóvenes que están por estos días de intercambio en nuestra región con la intención de que puedan llevarse una aproximación sobre cultura e historia.
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