La secretaria de Desarrollo para la Ciudadanía de la provincia de Santa Fe, Patricia Giuricich, visitó Jesús María esta semana, invitada por el Partido Socialista local, para referirse a la experiencia de su provincia en la adaptación de la Ley 26.061. La funcionaria respondió algunas de las inquietudes que le trasladó Primer Día.
¿Cómo se hace para aplicar la Ley cuando los recursos son escasos y las provincias no reciben los recursos necesarios?
- Si bien se venía peleando el cambio de paradigma desde hace décadas, se vota y se aprueba la ley una noche en el Congreso, sin saber, sin aviso. Entonces, pasa esto: de pronto nos encontramos en un nuevo paradigma sin recursos de ningún tipo. Para que la gente se ubique, toda la competencia que tenían jueces de menores, policía, y algunas ONG´s, de golpe pasan al Departamento Ejecutivo con cero recurso económico y humano. En principio, se produce un desfasaje fuerte en provincias densamente pobladas como la nuestra. La Secretaría Nacional (SENAF) ha bajado algunos recursos a través de las adendas que permiten que la Nación baje recursos a las provincias que presentan proyectos. Tratándose de Estado Nacional y Provincial, el resultado es que es burocracia duplicada, un espanto, porque la plata llega tardísimo, pero se puede hacer un trabajo.
¿Alcanza con eso?
- En absoluto. Es un refuerzo. Todas las provincias estamos en un trabajo muy intenso para poder ganar presupuesto para estas áreas, de poder poner en las gendas de todos -sobre todo en las áreas de Hacienda que son tan duras de entender todo esto- Esto tiene mucho que ver cómo se piense lo social y cómo se piense la infancia. Si seguimos pensando que tiene que haber un área exclusiva donde salgan las políticas de niñez seguimos creando un patronato que en lugar de judicial es administrativo. Lo que uno tiene que trabajar fuerte es que la noción de sujeto de derecho de 0 a 18 años tiene que ser una cuestión que atraviese a todas las áreas de gobierno.
¿Pudieron hacerlo en Santa Fe?
- Hemos constituido lo que es el Gabinete Social integrado por Desarrollo Social, Cultura, Salud, Educación, Trabajo, Justicia, y Seguridad. Nos reunimos sistemáticamente todos los jueves y tenemos armados equipos en las cinco regiones en que dividimos la provincia.
Hay que trabajar fuertemente el criterio de corresponsabilidad. Hemos errdicado la palabra derivación porque eso significa “te paso el paquete” y yo me lavo las manos. Todos los que estamos en el Estado tenemos una parte de la responsabilidad, sobre todo en lo social donde las políticas tienen que ser integrales. El Gabinete Social es la mesa de todos los responsables del gobierno provincial que tienen incidencia con la infancia y desde ahí se resuelven los problemas, se gestionan los presupuestos, y es la gota que horada la piedra.
¿Pudieron hacerlo funcionar?
- Obviamente que es insuficiente, pero logramos revertir la cuestión de que la administración atiende sólo de lunes a viernes. Logramos tener guardia los fines de semana con posibilidades de intervención. Nos costó mucho tiempo y recursos pero tenemos eso que no es poco. También, tenemos la estructura que la ley nos marca a nivel de funcionarios que permite que se descentralice la situación. Y hemos aumentado un 250 por ciento los recursos humanos para trabajar sobre estas problemáticas. Contamos con equipos de revinculación familiar permanente en contraposición a la inestabilidad que significa estar en una institución. Nos hemos dado un trabajo muy intenso con el Poder Judicial porque los jueces de menores no querían largar la competencia y los de familia no la quieren agarrar. Hoy estamos en un camino distinto.
¿Cuáles son los temas que sobresalen en la agenda?
- En el Gabinete Social hemos agendado como el problema número uno el tema del abuso sexual infantil, el maltrato, y la violencia familiar. Sobre esos temas estamos trabajando muy fuerte para generar protocolos de intervención donde articule el médico, con la policía, el trabajador social, la maestra. Esto que parece sumamente elemental jamás se hizo y es sumamente complejo.
¿En qué etapa de avance están sobre eso?
- En algunas regiones y dependiendo de la afinidad que tuvieran los equipos, algunos protocolos de intervención ya están definidos. Lo básico y elemental fue sentar juntos a todos esos actores que mencioné antes para decirles “ustedes son todos compañeros de trabajo y trabajan para el mismo patrón”. Es obligación ponerse a articular porque los casos se conocen en la escuela, en la policía, en el hospital y lo peor es que en esos lugares te traten mal.
De lo que se trata es de que haya un Estado que esté atento a esto y que pueda estar coordinando para brindar la asistencia que haga falta en ese sentido. Generar la posibilidad de alojamiento, de tratamiento, y de todo lo que hace falta a la víctima de una situación compleja como la que vive.
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