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Las elecciones Primarias de Colonia Caroya fueron un ejemplo de civismo para la zona

La implementación de la Boleta Unica fue un rotundo éxito ya que no generó ninguna crítica por parte de los electores y permitió saber los resultados una hora y media después de cerrados los comicios.


El mecanismo de selección de los candidatos a intendente de Colonia Caroya para las elecciones del domingo 3 de julio rindió sus frutos. El mismo día, justicialistas, radicales, y vecinalistas ratificaron en las urnas a sus candidatos para la compulsa electoral que se avecina.
Y demostró que el mecanismo de la selección a través de la Boleta Única (un solo voto entregado por la autoridad de mesa donde estén todos los candidatos y donde hay que poner una cruz para elegirlos) es un paso más hacia la transparencia total de los comicios que se avecinarán.
De ese primer test, sobre el que todo Córdoba tuvo puestos los ojos encima, surgieron las primeras fotografías del escenario político.
Gustavo Brandán se impuso a sus rivales partidarios, Héctor Nanini y Mario Vicente por una cifra apabullante. Con su triunfo, tiene derecho a poner los cinco primeros nombres de los concejales y el tribuno de cuentas, casi lo que se necesita para gobernar si llega a ganar la elección del primer domingo de julio.
Por el lado de los radicales, Luis Grión le propinó un golpe de nock out a las aspiraciones de Amílcar Ñáñez, a quien casi dobló en cantidad de votos.
Y Mario Rojas obtuvo el 300 por ciento más de lo que necesitaba para ratificarse como candidato del Frente Cívico y Social y de la Unión Vecinal Federal. Rojas necesitaba sumar 140 votos válidos y obtuvo casi 500.

La lectura
¿Hubo un mensaje de la ciudadanía hacia los aspirantes a la sucesión de Rodolfo Visintín? Dependiendo del lugar de la contienda, la respuesta fue positiva o negativa. Gustavo Brandán señaló que sí, que era una clara manifestación de desaprobación hacia las formas que ha tenido la actual gestión de manifestarse para con sus ciudadanos, particularmente en algunos gestos de altanería y de soberbia.
Luis Grión prefirió la versión que cuenta que se trató de una interna partidaria en la que nada tuvo que ver la gestión desarrollada hasta el momento. En ese contexto de independientes y afiliados votando todos por igual el mismo día resulta difícil saber cuál de las versiones es la más aproximada a la realidad.
Lo cierto es que la fotografía del pasado domingo cuenta sobre una recuperación asombrosa del Partido Justicialista (sus tres candidatos sumaron más adhesiones que los dos radicales). Hablan sobre una disminución de la intención de voto hacia el Frente Cívico si se lo compara con la elección de 2007. Y también hablan de una caída en la intención de voto hacia el oficialismo, más allá de la encendida defensa sobre el ordenamiento de la caja municipal y del estado en que recibieron el municipio.
Cuando decimos fotografía decimos, precisamente, que es la instantánea de un momento específico en una comunidad específica. No significa, desde ningún punto de vista, que ese resultado se pueda traspolar al domingo 3 de julio.
Dice, en todo caso, que habrá que estar alerta, modificar discursos, cambiar estrategias, intensificar el contacto con los electores, mejorar las propuestas, avanzar sobre los nombres que estarán al frente de los proyectos e ideas, entre otras cosas.
 Muchos vecinos de Colonia Caroya sienten que los últimos 12 años de gobierno municipal, sirvieron de poco para consolidar la idea de progreso. Muchos de los grandes temas ciudadanos siguen pendientes de resolución, sin contar las obras que resultarán indispensables para que Colonia Caroya de el salto definitivo al siglo 21.
Caroya ha prosperado en la última década de mano de los emprendimientos privados y de las instituciones intermedias, lo que demuestra que hay buenas semillas en la comunidad. El Estado municipal es el que parece no haber estado a la altura de las circunstancias entrelazando los hilos de esa pujanza privada.
En parte, el Estado no dio respuestas por incapacidad y en otros casos por mezquindad, pero en ambos casos la que perdió fue la comunidad. Y a ese estado la vienen gobernando radicales y justicialistas desde el retorno de la democracia.
El ejemplo cívico que dieron los 3500 caroyenses que fueron a votar el domingo 10 de abril debiera motivar la reflexión de los aspirantes a la sucesión en el palacio municipal. Porque Colonia Caroya tiene todas las condiciones para recuperar su espacio en el concierto provincial.
Claudio Minoldo

Claudio Minoldo

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