La realización de un documental de 18 minutos sobre la vida de Don Gabriel Céspedes por parte de Lucas Contreras y Daniela Savorgnan mereció una declaración de Interés Municipal del Concejo Deliberante de la ciudad.
En el material fílmico hay fotografías que nunca antes se vieron sobre la emblemática Torre de los Céspedes, una explicación sobre su función y su utilidad, y un relato impecable de Rosita Rovelli Céspedes, una exquisita mujer que tiene el honor de llevar el apellido de su abuelo, el influyente Gabriel Céspedes, uno de los hombres importantes de la historia de Jesús María.
La idea de rescatar la historia de la familia Céspedes y de la imponente Torre que se ubica en el jardín del club Social se viene macerando desde hace años, pero hizo falta el encuentro de dos “guardianes” del preciado bien para que aquello tome forma de documental.
“Nos dijimos por qué no hacerlo, por qué no rescatar el relato oral, todos los recuerdos que tiene atesorados Rosita en su memoria sobre los 20 años en que ella vino a veranear a ésta que es su casa”, explicó Savorgnan sobre el punto de partida a lo que le añadió Contreras: “La idea era hacer un registro audiovisual de Rosita. No estaba en claro al principio hacer un corto documental, pero cuando vimos que el relato de Rosita por su característica de ser ameno, breve, conciso, y tener una estructura que práticamente nos daba el guión armado, se nos ocurrió concretarlo”.
El material indaga en las características de la torre, sobre quién fue Gabriel Céspedes, y sobre el estado de ánimo por el que pasó la familia cuando se desprendió del bien, al igual que sobre el momento del deterioro de la torre y del comienzo de los trabajos de restauro que encaró con fondos propios el municipio de Jesús María.
La entrevista completa a Rosita duró 50 minutos y fue realizada en la torre el 14 de enero pasado. Contreras se encargó del montaje y de ensamblar en el corto las fotografías inéditas sobre la familia en Jesús María.
“La intención es que este trabajo llegue a la gente -añadió Savorgnan- que conozca la torre, que entienda por qué está este edificio tan particular en el centro de la ciudad. El relato de ella logra llegar a la gente para que comprenda su razón de ser en Jesús María”.
El club de los amantes de la Torre
Sin carné, sin cargos directivos, sin fines de lucro, y sin otra motivación que revalorizar este tremendo patrimonio histórico, hay que señalar que existe una suerte de club tácito de amantes de la Torre Céspedes que integran unos cuantos hombres y mujeres de Jesús María.
Son los que vienen pregonando desde hace años la necesidad de que se recupere para todos los jesusmarienses. Son los que se suman a los eventos que se organizan en los jardines del Club Social y que tienen como marco el monumental edificio y son los que la visitan con regularidad para saber sobre sus avances. Ese club pretende generar un contagio, sumar vecinos y voces a la revalorización del monumento de la ciudad.
“Para nosotros fue importantísimo hacer este corto con Rosita porque es la única persona viva de la familia que vino a veranear acá y que, de algún modo, “curtieron” la Torre”, adicionó Savorgnan siguiendo el relato.
Para Contreras, son pocos los amigos de la torre porque la mayoría no tenía acceso al edificio en el sentido de conocerlo para poder apropiárselo: “Si paso por afuera veo una estructura de concreto muy bonita pero ahí se acaba mi conocimiento sobre esto. Creo que va a haber muchos más amigos, a partir de esta posibilidad de divulgar”.
Como muchos otros trabajos, éste comenzó a pulmón con una inversión que fue absorbida por los productores hasta que vieron en el material resultante la posibilidad de darle valor agregado. Allí fue que tomaron contacto con el municipio que les “compró” los derechos de uso y reproducción del material a cambio de reintegrarles los costos de producción que tuvo el corto.
En el Concejo Deliberante todos estuvieron de acuerdo en darle entidad de Interés Público por el valor documental que tiene el trabajo.
Una curiosidad del trabajo es que tiene música original. El músico Raúl Pandolfi, más conocido como Baúl (en el trabajo que tenía con Piñón Fijo) o como integrante del combo de Jazz Es lo que Hay compuso toda la banda sonora en ¡24 horas!!
En balance de este primer trabajo, los realizadores agradecieron la predisposición del municipio local, de la familia Rovelli Céspedes, de Cristian Giorgis y Esteban Castagna, de Jimena Picat y Leo Aznar, quienes de una o de otra forma colaboraron para que el trabajo haya podido concretarse.
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