Sin ánimo de plantear que Primer Día se ha rediseñado, lo cierto es que notarán algunos cambios a partir de esta edición: cambios en la tipografía de los títulos y de las bajadas, cambios en el diseño de la cabeza de página con más blanco y secciones más visibles.
¿Por qué tanto cambio? Queremos que nos sigan eligiendo, que sigan retirando en forma gratuita su ejemplar en los más de 70 puntos de distribución que tenemos en la región que componen Sinsacate, Colonia Caroya, y Jesús María. Que les de ganas de pelearle a la fiaca y se tomen el trabajo de salir el domingo a buscar nuestro semanario.
La verdad es que arrancamos este año con expectativas de seguir creciendo entre la gente y eso nos llevó a decidir la incorporación de 500 ejemplares más cada semana con lo que la distribución alcanza los 2000 ejemplares cada domingo. Esto significa una masa de 8000 lectores porque hay que convenir que un solo ejemplar es leido en promedio por cuatro personas.
Y con ese afan de seguir avanzando, también hemos cambiado nuestro eslogan. Decidimos dejar atrás “Sabemos cómo contarlo” para pasar a enarbolar la frase que conlleva mucho de deseo: ”Comunicamos construyendo”.
Porque en Primer Día las instituciones sociales tienen un lugar destacado, al igual que los emprendimientos solidarios, los esfuerzos individuales y colectivos, y todo el quehacer que trasciende la vida política de nuestras comunidades. Estamos convencidos de que la puesta en relieve de esos temas nos convierte en aliados en la lucha por la construcción de una sociedad más justa.
Desde este domingo, también llegamos a Deán Funes, a través de un convenio que sellamos con Dante Taboada Cardoso, propietario del diario digital Así Somos y corresponsal de Estación FM de Villa del Totoral, entre otros pergaminos. Dante nos acercará cada semana información sobre lo que ocurre en el Departamento Ischilín y Primer Día estará cada domingo en la localidad en puntos estratégicos para que los vecinos puedan retirar en forma gratuita su ejemplar.
Podríamos habernos quedado en la conformidad de salir como siempre, en los lugares de siempre, y nadie notaría la diferencia, pero tenemos grandes proyectos para este medio de comunicación y queremos cristalizarlos haciéndolos parte a ustedes lectores de cada nuevo peldaño que escalamos.
Sostenemos que la gratuidad en la distribución no tiene que ser sinónimo de mala calidad o flojo contenido. En eso radica la diferencia. Hacer llegar el mejor material posible a los lectores a costo cero.
Venimos de un descanso prolongado porque tuvimos un 2011 intenso con varios procesos eleccionarios que depositaron a las nuevas autoridades en la silla de la intendencia, de la gobernación, y de la presidencia.
Para Primer Día fue una prueba de fuego trabajar con diferentes agrupaciones políticas a las que se les ofreció idéntico trato, idéntico espacio periodístico, e idéntica objetividad en el tratamiento de la información.
Es lo que intenta hacer un semanario que se autocaratula independiente y que no quiere perder ese sesgo que lleva como marca distintiva.
Pero este año tendrá cero condimento eleccionario y Primer Día tendrá como misión ir supervisando cada una de las promesas de campaña que depositaron a las autoridades en sus lugares. Ser una especie de auditor sobre los proyectos prometidos a la comunidad y que debieran plasmarse en hechos concretos.
Y lo más importante: seguir contando lo que hacen los que trabajan por los demás en forma gratuita, sin percibir remuneración por ello. Bienvenidos al año cuatro de Primer Día y ojalá que nos sigan eligiendo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario