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Arte que te quiero arte

Por: Juan Manuel García Escalada (Psicólogo Social y Docente).

Cuando el grupo irlandés de rock U2 se presentó en nuestro país con su GIRA TOUR 360 º, el impacto visual del escenario, (con cientos de toneladas de hierro y luces en su armado),  girando en redondo en el estadio y mirando permanentemente a todos los presentes, fue, ante quienes estuvieron allí, una obra de ARTE VISUAL- MUSICAL. Sonido y Luces. Abstracción y virtualidad. Pero la imagen que desplegaba impactaba sobremanera a la concurrencia allí presente, que hablaba de una dimensionalidad de las ondas electromagnéticas que el universo esconde y el ser humano quiere ir descubriendo. Nos mostraba la magnificencia del imaginario personal ante un conglomerado de hierros y sonido hecho arte.
No es ocurrencia lo que digo, es que el arte se metamorfosea desde distintas e innumerables maneras y nos termina demostrando que la conversión: “ARTE”,  ES USO DEL TIEMPO.
Porque el TIEMPO es en definitiva ARTE. ¿Acaso nosotros no somos en el transcurso de nuestras vidas los hacedores de nuestros propios goces, con luces y sombras, y el uso de ello (luces y sombras, como elementos) es lo que nos va a llevar a ser atractivos, o no, para los demás, ya que seremos nuestro propio artista en el  arte de construirnos, en el tiempo de   permanencia, hasta nuestra muerte?
Hago esta pequeña introducción, para decir algo que me llama la atención. En nuestro pequeño territorio de todos los días, y en todas las escuelas secundarias de nuestra zona, no hay una orientación en Arte.
No hay casualidades permanentes, ni únicas. Tampoco aisladas.
En definitiva, no hay casualidades. Hay sí, causalidades.
Hablamos de educar en diversidades. Es preciso entender qué se entiende por diversidades. ¿ Diversidad es aquello que se toma para marcar las diferencias?
Diversidad es integrar. No integramos discapacidades solamente. Integramos conocimientos que supuestamente se fragmentan, en aras de una mayor especialización (bienvenidas éstas); ya se ha demostrado con creces que no hay aislamiento perpetuo sino compartimentos que se integran como un puzzle de manera constante. Ernesto Sábato lo escribió y dialogó en su libro  “Uno y el Universo”.
Digo esto, porque no entiendo, que si hay una zona de producción, y uso de tecnología en función de servicios y productividades, que son parte del capital financiero y económico,  no se comprenda que éste se ha desarrollado sobre la base del Arte.
Todo está en la imaginación; no puedo construir absolutamente nada si no lo sueño, si no lo imagino antes. Y eso es ARTE, nada más y nada menos que ARTE.
De manera que en todos los establecimientos educativos de la zona no hay una orientación en ARTE.
Y es lamentable que no se quiera comprender, aceptar, el papel que juega el Arte en el desarrollo de las sociedades. Se desarrollan mucho más, y mejor de lo que estamos ahora; prisioneros de una sumatoria de cantidades de granos y más granos y chip y más chips; intereses y capitales.
Leonardo da Vinci “jugaba” con sus dibujos. Los creaba desde una mirada artística. Era el Renacimiento. Las artes, la pintura, la creación de los puntos focales, de las perspectivas, y todo ello sirvió para después desarrollar ciencia. Ciencia verdadera. La ciencia y la tecnología verdadera llevan consigo, en el alma, el arte. Creación, sueños e imaginación. Nada en la ciencia carece de ello. Sino habría un sin sentido a la existencia humana.
El arte actual. El que las generaciones nuevas miran es un arte de movilidad, de enlace, de tecnología y de función perecedera que vuelve en cualquier instante a ser Arte transformado.
Las sociedades, grandes y/o pequeñas no crecen, se estancan, cuando niegan la posibilidad de desarrollar la creación individual y colectiva.
 “Un chino acostado en el campo es observado por un occidental, que le dice: Usted está  perdiendo tiempo. Estoy ganando tiempo es la respuesta al otro”. El impertinente, que tiene como (valor exclusivo) al tiempo en función de usos-bienes materiales.
ARTE: Emoción, Sensibilidad, Movilidad, Creatividad, Producción, Desarrollo.
Sociedades que buscan ser creativas y competentes y que niegan la posibilidad de desarrollar el arte se transforman en copìadoras de otros modelos, y se colocan en instancias de ser sociedades dependientes. Con  lo que  lleva a transformarse en repetidoras de arquetipos y pérdida de identidades. Aún dentro de un mundo globalizado. Nuestra historia social y cultural lo avala.
No hay vida sin arte. Nuestra vida es un arte en construcción permanente. Y nada existe sin nosotros. Las sociedades están hechas desde nuestra imaginación y si perdemos la capacidad de soñar, que es crear arte y ciencia al futuro, seremos “constructos” de armados institucionales que mostrarán individuos que deambulan sin identidades mínimas que puedan sostener sus propios imaginarios personales; y el miedo y la violencia correlativa ante la cercenación de la imaginación acarrearán síntomas de desamor y vacío en sus existencias.

Claudio Minoldo

Claudio Minoldo

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