Lo presentan al público el próximo viernes 2 de diciembre a las 20 en la Casa de la Cultura, sita en Av. San Martín 3697 de Colonia Caroya. Fue escrita por los alumnos de sexto año que investigaron exhaustivamente sobre los plátanos que son el orgullo de la ciudad.El profesor Eduardo Angulo es el responsable del dictado de la materia Proyecto Integrador en el IPEM 349 de Colonia Caroya y cada año examina junto a la Dirección de la institución y junto a los alumnos cuál podría ser el trabajo a desarrollar que englobe lo aprendido a lo largo del cursado de los estudios de nivel medio.
Generalmente, los alumnos encaran trabajos vinculados con la orientación del colegio y buscan temas vinculados a la producción agropecuaria y al cuidado del ambiente. Este año, mientras buscaban referencias de Colonia Caroya en los motores de búsqueda de internet se toparon con que la mayor asociación de la ciudad se da con los plátanos de la avenida San Martín, además de la producción de embutidos y de vinos regionales.
De allí, surgió la iniciativa de relevar la situación de los árboles que en 2015 cumplirán sus primeros 100 años de vida. Lo que se plasmó fue un trabajo en el que se pone de manifiesto que tienen importancia ambiental, paisajística, climática, y comunitaria.
La traducción de un libro escrito en lengua inglesa por parte de la profesora del IPEM 349 Claudia Canillo fue el punto de partida de los diferentes grupos de trabajo que a lo largo del añó fueron dándole forma al libro.
El resultado: 20 capítulos divididos en 103 páginas cuya edición fue encarada por el municipio de Colonia Caroya, la comuna de Colonia Vicente Agüero, Arcor, y el gobierno de Córdoba a través de la Dirección de Igualdad y Calidad Educativa que depende del Ministerio de Educación.
Tanto fue el entusiasmo que generó que también se compuso una canción que entonó Tania Torres, alumna del colegio, con músicos que también cursan en la institución.
El libro tiene como cometido indagar sobre lo que existe en el imaginario colectivo respecto de los plátanos y, para ello, se utilizó mucho la entrevista a personas con mucha historia dentro de la ciudad.
Los Plátanos de Colonia Caroya. Símbolo de mi ciudad trae entre sus contenidos información respecto de la historia de la especie, sus características, cómo enfrentan las adversidades, cómo se riegan, cómo se poda, fertilizan, plantan, y cómo se gestionan integralmente, entre otros aspectos.
¿Les servirá a las autoridades el libro para poner en práctica cuidados hacia los plátanos?
“Se dejan abierta muchas puertas que nosotros creemos que podrían utilizarse como es el caso de la parte de la fitosanidad. Se abrieron allí nuevas líneas de investigación y esperemos que sirvan para que alguien los siga”, explicó el profesor Angulo.
Según señalaron sus autores, se trata de un libro pensado para todo público, especialmente para los alumnos de los demás colegios que siempre necesitan información sobre este curioso símbolo que tiene la ciudad y que la convierten en única en sudamérica.
“Cuando uno empieza a investigar se topa con que no hay mucha información, excepto sobre los orígenes, pero poco de la historia. Al avanzar, uno se topa con que debajo de ese lugar ocurren tradiciones, se realizan fiestas. Ya van a hacer 100 años desde que están y han cambiado muchas cosas en Colonia Caroya, pero siguen allí”, aportó Angulo.
La fecha histórica de la plantación habla de 1915, oportunidad en que el intendente Céspedes genera el tramo que va desde el ferrocarril hasta el lote XV. Después, se conocieron los datos sobre los tramos que se plantaron con posterioridad. Fue la gente la que aportó muchos de los datos de este curioso libro que será presentado en sociedad y que servirá para que la comunidad tenga mayores argumentos para defender su mayor patrimonio natural.
El valor intangible
¿Tienen importancia ambiental los plátanos? Si uno observa la hoja de los plátanos a través de una lupa verá infinidad de material particulado adherida en cantidad impresionante. Absorbe partículas de todo lo que ocurre a su alrededor.
En segundo término, la importante sombra que genera evita que las casas que están a sus costados utilicen energía para refrigerarse. El ahorro ya ha sido medido en cantidad de megavatios y es una cifra muy importante.
También sirven como agentes de captación del agua de lluvia y logran demorar la velocidad del agua mientras llueve. Ayudan a contrarrestar la contaminación sonora y son una postal para el turista y para el dueño de casa que logró darle fisonomía a su ciudad con una gigantesca arboleda.
Los párrafos que anteceden son parte de la investigación que realizaron los alumnos de sexto año del colegio Giovanni Bosco de Colonia Caroya dentro de la materia Proyecto Integrador y cuyos resultados lograron plasmar en un libro que se presenta el próximo viernes en la Casa de la Cultura caroyense.
¿Qué pasaría si mañana se extraen todos los plátanos de la avenida? Seguramente, ni siquiera se podrían disimular muchas de las construcciones precarias que van a lo largo de la avenida San Martín. Cambiaría todo, sin dudas.
¿Qué dicen los autores del libro? Guillermo Segura se animó a narrar sus opiniones: “Lo que estuvo bueno fue, desde que comenzamos a trabajar con el libro, pudimos tener contacto con mucha gente grande que estaban abiertas a contarnos cómo era su experiencia, cómo habían vivido, y cómo recordaban que fueron creciendo los plátanos. Entonces, pudimos escuchar todas esas experiencias, incluso de los enfrentamientos con Jesús María, sobre el sistema de riego”
“Cuando vino Oscar D’olivo -añadió Segura- nos contó gran parte de la historia, sobre cuando algunos los querían extraer, y las discusiones que había en las reuniones familiares donde algunos los querían y otros no. Eso fue lo que más me gustó: tener contacto con toda la gente grande”.
Otro que se animó a relatar su experiencia como escritor de un libro fue Ignacio Osler en cuyo grupo trabajaron sobre las adversidades que enfrentan los árboles: “Investigamos sobre todo lo que afecta al árbol como puede ser la temperatura, el tendido de los servicios públicos. Pusimos en el libro cuáles son los fenómenos naturales que afectan a los árboles como las tormentas, el clima, y el cambio climático, pero también sobre cómo están expuestos a las líneas de alta tensión que afectan al árbol. También incorporamos el efecto del smog, el tránsito sobre la avenida, y la existencia del pavimento sobre la avenida. Es como un tunel donde todo pasa debajo de él”.
Allí descubrieron que se trata de una planta noble porque esta expuesto a numerosos problemas y, sin embargo, resisten.
Franz Castro, finalmente, realizó su aporte sobre los sentimientos que les generó la redacción del libro: “Es la primera vez que publicamos algo. De mi parte me siento feliz, orgulloso de mí y de mis compañeros. De haber podido escribir un libro nosotros mismos y que a lo mejor todos lo tengan, que lo lean, y que puedan opinar sobre él”.
“Me sirvió para valorar a los plátanos, totalmente, como parte del lugar donde vivo. Me llamó la atención la cantidad de plagas y enfermedades que sufre y cómo resisten hasta ahora teniendo los años que tienen”, remató Castro.
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(N. de la R.) Al igual que en el caso de los alumnos de sexto año del IPEM 69 (los de la fresadora automática con control numérico que ganó el primer premio nacional de la feria de ciencias), lo que ocurre cuando uno se topa con estas noticias es que se siente esperanzado sobre el futuro que nos depara con estos jóvenes.
Nos ayudan a pensar en que podemos esperar grandes cosas de ellos y que el interés que ponen en sus proyectos depende en mucho del incentivo que reciben de sus docentes. Podemos concluir, entonces, en que hay docentes con vocación, con entrega, y con capacidad de entusiasmar. Esa unión suele dar frutos abundantes como un libro o un invento.
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