Después preguntan por qué la gente se cansa de participar
No hace falta más que preguntar a las organizaciones civiles sobre lo que cuesta convocar a personas para que trabajen, pero Jesús María se da el lujo de armar 2 comisiones que tratan los mismos temas.
Porque no tienen tiempo o porque no tienen ganas o porque no los seducen los actores que convocan, lo cierto es que cada vez menos personas participan de la vida de las organizaciones civiles. Cuesta armar una cooperadora, cuesta armar una comisión directiva, cuesta armar una lista de candidatos, o sea, cuesta un “Perú” que la gente participe.
Con buen tino, el municipio de Jesús María decidió convocar a un grupo de personas que, a su vez, debían convocar a otro grupo de personas para empezar a trabajar sobre una suerte de manifiesto respecto de cómo debía encarar su futuro la ciudad de cara al bicentenario. Todos esos debates, de los que han participado cerca de 80 personas, debían plasmarse en un documento con sugerencias y recomendaciones respecto de la economía, la educación, la salud, el trabajo en los barrios, y el planeamiento urbano, entre otros temas.
Ése era el objetivo de la Comisión del Bicentenario que ya se “comió” a dos coordinadores y cuya suerte es una incógnita.
En las diferentes subcomisiones se comenzó a trabajar sobre ideas para la ciudad donde el corto, el mediano, y el largo plazo estaban contemplados.
Esto es: cosas para hacer ya, otras para hacer dentro de un tiempo y otras para la Jesús María que vendrá. Vamos a insistir sobre el número: 80 personas provenientes de diferentes esferas de lo público y privado trabajando como una amalgama y generando ideas para la ciudad del mañana.
¿Qué ocurrió en el medio? Pues que se generó una segunda comisión, esta vez, bajo el coqueto nombre de “multisectorial” que también se dividió en subcomisiones y comenzó a trabajar en... ¿adivinen qué? Sí, en casi los mismos temas en que trabaja la Comisión del Bicentenario.
Y no es que lo digan los comunicadores. Lo dicen quienes trabajan en ambas comisiones: los temas se tocan en las tangentes y en las secantes y en todos los cuadrantes.
Por lo tanto, se logró que mucha más gente trate los mismos temas y que tenga que incorporar un día más en su agenda para poder participar. Todo un despropósito.
Lo que es de esperar es que al menos una de las dos comisiones -Bicentenario y Multisectorial- genere un documento que sirva de faro y guía a las actuales y futuras autoridades de la ciudad.
Que la conjunción de tantas voluntades devenga en una radiografía de la ciudad y en una nómina de obras y servicios a poner en marcha para la transformación de lo que merece ser transformado. En definitiva, que nada haya sido en vano, y que no se diga de las comisiones lo que siempre se dice.
No hay comentarios:
Publicar un comentario