Pero el festejo estuvo acotado a la intimidad del Poder Judicial y al foro de abogados locales y unos pocos invitados. Es que pese a la importancia de la sede tribunalicia local -maneja entre 30 y 40 mil causas por año- sus principales referentes siempre han mantenido un bajo perfil y muy lejos de cámaras y grabadores. De hecho, no hubo ningún discurso pronunciado por ninguno de los magistrados que se desempeñan como máximas autoridades locales.
En los pasillos del moderno edificio con que cuenta hoy la sede -inaugurado en octubre de 2009- se montó una muestra de cuadros pintados por abogados locales.
Y en el hall de ingreso fueron descubiertas dos placas conmemorativas por la fecha, una de ellas en nombre de la delegación Jesús María del Colegio de Abogados de Córdoba y otra por la Asociación de Magistrados y Funcionarios del Poder udicial de la Provincia de Córdoba.
Antes del brindis de rigor y de compartir una grata recepción con fiambres de la zona y bocaditos, ex camaristas y jueces interpretaron algunas canciones de todos los tiempos ante un atento auditorio.
La ocasión también sirvió para realizar un balance sobre los avatares que le tocó atravesar a los Tribunales locales en estas dos décadas de vida.
Historia y testimonios
Con 3564 metros cuadrados, la sede de los Tribunales Ordinarios de Jesús María se transformó en la más importante del interior provincial dentro de la primera circunscripción judicial, es decir, contando las sedes de Carlos Paz, Alta Gracia, y Río Segundo.
Pero la concreción del edificio fue uno de los tantos anhelos en los que se embarcaron magistrados, funcionarios, empleados, y abogados del foro local ante las máximas autoridades judiciales dentro de la provincia de Córdoba.
Por eso, quisieron que quede registro de la celebración por el vigésimo aniversario desde que comenzó a funcionar Tribunales en Jesús María. Pero fue un festejo acorde a la austeridad con que los magistrados locales se han manejado a lo largo de las dos décadas: descubrimientos de placas recordatorias, un poco de música, un ágape y un brindis, además de la exposición de cuadros de algunos abogados del foro local. Todo en el pasillo central de la moderna sede local.Al juez José Sartori le tocó vivir las dos etapas dentro de su carrera como funcionario judicial en los tribunales locales. Fue secretario en la época en que los Tribunales funcionaban en un precario edificio frente a la terminal de ómnibus, fuente de permanente queja de quienes concurrían al lugar en busca de justicia. Por eso, sus palabras engarzaron esos dos momentos: “Las instituciones que no tienen memoria no existen. De allí, que la iniciativa haya sido en estos 20 años desde la creación de los Tribunales de Jesús María que quede un pequeño testimonio de agradecimiento”.
“Uno -añadió Sartori- ha participado en distintas etapas de la carrera y nos ha albergado esta institución con todas las esperanzas e ilusiones que uno pone cuando enfrenta una actividad laboral. Para toda nuestra familia y para quienes compartimos estos sueños y alegrías estos 20 años significan mucho”.
Sartori coincidió en que la concreción de un nuevo espacio físico vino a mejorar los servicios que se le prestan al justiciable “Eso nos llena de satisfacción día a día y de orgullo, pero a su vez nos compromete firmemente en la labor de realizar la justicia como un servicio y un compromiso hacia la comunidad”.
Aunque se trata de un juez joven, Oscar Patat no deja de ser el magistrado que vivió los 20 años completos dentro de la institución y sigue siendo una referencia para sus pares y para quienes están por debajo de su autoridad. Remiso al contacto con la prensa, sin embargo, accedió a señalar con algunas palabras sus sentimientos: “Uno hace un raconto de la historia desde que uno llegó a esta ciudad y 20 años es muy mucho, aunque ya tenía algunos años en la ciudad de Córdoba (34 años en total dentro del Poder Judicial), pero realmente la evolución ha sido muy positiva porque tener esta sede con este edificio es maravilloso, sobre todo cuando uno recorre otros lugares de la provincia y ve las condiciones en las que se trabaja. Es un privilegio tener este lugar”.
Patat también señaló su satisfacción por la cobertura de los cargos vacantes que había en la sede local. Mucha gente desconoce que la justicia local maneja entre 30 y 40 mil causas por año, una cifra enorme desde todo punto de vista.
“La situación siempre es crítica como señaló el propio presidente del Superior Tribunal. En recursos humanos hubo un aumento pero la litigiosidad también sigue en aumento. Vamos un poco lento en cuanto a ello, porque la situación crítica de la cantidad generalmente cede en cuanto a la calidad. No obstante, uno trata de mantener el mejor servicio que uno pueda porque es lo que más se merece la gente”.
Finalmente, el presidente electo del Colegio de Abogados, José Capellino, también se refirió a los 20 años: “Realmente la lucha por el edificio y por la sede misma fue muy ardua. Los colegas que me precedieron tuvieron que batallar mucho porque había muchas sedes con idénticas necesidades. Hoy, sería imposible pensar que se dependa de una sede que esté a más de 50 kilómetros de distancia”
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